Ayudamos a nuestros clientes a determinar el punto crítico de una aplicación o de un servidor que utiliza una carga extrema y comprobamos el comportamiento del sistema durante un bloqueo para descubrir cómo se recupera.
Nuestros tests de rendimiento y estrés permiten anticipar fallos, detectar cuellos de botella y evitar que la experiencia de usuario se vea afectada por problemas de rendimiento.